Las discapacidades físicas no son obstáculo para estudiar en la Usac

Según cifras oficiales, el 2 % de la población estudiantil de la Universidad de San Carlos de Guatemala (Usac) padece algún tipo de discapacidad física, pero esto no representa ningún obstáculo para que estos alumnos alcancen sus objetivos académicos y profesionales. Desde 2014, el Consejo Superior Universitario (CSU) aprobó la Política de Atención a la Población con Discapacidad en la Usac, la cual fue elaborada por una comisión universitaria integrada por expertos y personas con discapacidad, y que contiene los “ajustes razonables” que se implementan a nivel general, a fin de adecuar todos los servicios que ofrece la casa de estudios superiores a esta población.

Los “ajustes razonables” son las “modificaciones necesarias y adecuadas” implementadas a nivel administrativo, académico y de servicios, bajo el concepto de “educación inclusiva”, para ofrecer un mejor aprendizaje para las personas con discapacidad. Funcionan con la eliminación de barreras ambientales que dificulten el desempeño de las funciones esenciales de un centro de estudio ocupado por una persona con discapacidad.

En el área académica, la política universitaria incluye, entre otras medidas “el ajuste de las metodologías de enseñanza de los profesores y las dinámicas en el aula”, para facilitar el aprendizaje de estudiantes con discapacidad, y “su sistema de evaluación o indicador de logro de alcance de la competencia”. Así como la “adaptación de los procesos de admisión, orientación, tutoría para el seguimiento, valoración de competencias y logros de los estudiantes con discapacidad”, y el uso de tecnologías de información y comunicación para los procesos de aprendizaje de las personas con discapacidad.

Según el Conadi, ente coordinador, asesor e impulsor de políticas generales en materia de la discapacidad del país, de la población estudiantil de la Usac afectada, la principal discapacidad física que padece es la dificultad de movilización por padecimiento de sus miembros inferiores.

Fausto Reyes Morales, jefe de departamento de participación ciudadana del Conadi, señala que con el fin de promover y garantizar los derechos de las personas con discapacidad en la Universidad de San Carlos de Guatemala, se coordinan “los ajustes razonables que una persona con discapacidad requiera, dependiendo su condición de discapacidad”, como, por ejemplo, “el derecho al acceso de interprete de lenguas de señas”, para las personas sordas.

Además, explica Reyes, se programan foros, actividades y talleres dirigidos a maestros y a estudiantes para sensibilizar a la comunidad universitaria sobre la adecuación curricular para personas con discapacidad y los ajustes razonables.

Genesis Gabriela Farfán Cabrera, estudiante del noveno semestre de la Escuela de Ciencias de la Comunicación de la Usac, es ciega. Y según su experiencia, sus docentes han realizado una labor académica “bastante acertada porque brindan los conocimientos necesarios a cada uno como estudiante”.

Sus catedráticos, dice, han implementado los ajustes razonables necesarios para que ella se pueda desempeñar como un estudiante más en su carrera, sin que su discapacidad represente un obstáculo.

De momento, las personas con algún tipo de discapacidad son exoneradas de las pruebas básicas y específicas para ingresar como estudiantes a cualquier carrera de la Usac. Esto continuará así hasta que el Sistema de Ubicación y Nivelación y cada unidad académica cuenten con los recursos necesarios para diseñar pruebas accesibles para las personas con discapacidad.

Además, la Sección de Orientación Vocacional ofrece asesoría en la elección de carrera para las personas con discapacidad, acompañamiento en el proceso de inclusión en las unidades académicas para la implementación de los ajustes razonables, y asistencia psicopedagógica.