Así ayudan los vendedores de la USAC en tu formación profesional

Los vendedores y estudiantes se apoyan más de lo que creen, ya que no solo se trata de brindar un objeto o servicio por dinero, sino de un apoyo que va desde becas y mantenimiento de edificios hasta la contratación de personal e incluso el funcionamiento de laboratorios. Todo esto es posible gracias al pago mensual que realizan los comercios ubicados dentro y fuera de las diferentes unidades académicas.

La Comisión para la Actividad Comercial de la Universidad de San Carlos de Guatemala es la entidad encargada de regular las ventas dentro del campus central. Cuando lo considera necesario, y tras el cumplimiento de todos los requisitos por parte del interesado, elabora los términos de referencia y realiza convocatorias para la adjudicación de espacios físicos destinados a actividades comerciales dentro de las instalaciones universitarias.

Carlos Estrada, propietario de un negocio especializado en crepas dentro del campus, comenta que comenzaron a vender este producto en 2012 con una mesa de un metro cuadrado y una sombrilla. La idea de su negocio surgió durante una visita a El Salvador, donde observó la popularidad de las crepas y notó la falta de variedad de este alimento en Guatemala. “Investigamos al respecto, nos capacitamos, vimos dónde comprar las máquinas y nos tiramos al agua”, dijo Carlos Estrada.

Uno de los objetivos al iniciar este proyecto fue apoyar a madres solteras, de manera similar a cómo la universidad los apoyó a ellos. Con el tiempo, la Comisión para la Actividad Comercial les brindó medio metro cuadrado adicional para que pudieran trabajar mejor y, con los años, ampliaron su negocio con más máquinas y personal, hasta tener un kiosco mejorado. “Actualmente estamos trabajando con gente que quiere ir adelante, personas que buscan una oportunidad y no se las dan porque nunca han trabajado o no tienen un papel que los respalde, pero que tienen el potencial de aprender y, con una buena capacitación, lo pueden hacer”, comentó Carlos.

Ver el soporte económico que proporciona a estudiantes y familias, junto con la evolución de su negocio, desde cargar tambores de gas, la mesa y la sombrilla bajo diversos climas, es lo que actualmente lo hace sentir más que satisfecho.

Los precios para obtener un lugar de venta varían, ya que las tarifas dependen del metro cuadrado utilizado y el tipo de negocio que estará operando.

A continuación, se muestra una tabla con los precios:

Los ingresos percibidos por concepto de actividad comercial se distribuyen según lo establecido en el capítulo VI del Reglamento General para el Desarrollo de la Actividad Comercial. Las tarifas por arrendamiento de espacios físicos para la venta de bienes y servicios, así como las cuotas por extracción de basura, servicio de energía eléctrica, consumo de agua potable y drenajes en las instalaciones de la Universidad de San Carlos de Guatemala son regidas por los montos que apruebe el Consejo Superior Universitario, a propuesta de la Comisión para la Actividad Comercial, la cual se presenta cada dos años o cuando la Comisión lo considere necesario.

En el caso de Centros Universitarios Regionales, son los Órganos de Dirección respectivos quienes proponen las tarifas, enviando a la Comisión la tabla de asignación, la cual es presentada cada dos años o cuando los Órganos de Dirección lo consideren necesario, para su aprobación por parte del Consejo Superior Universitario.

Mirna López tiene una venta de productos de librería y otras variedades. Decidió colocar su negocio en la USAC porque sabía que los estudiantes suelen olvidar libros, lapiceros y cuadernos, lo que le permite vender su mercancía y obtener ganancias. “Empecé poniendo mi venta en una mantita en el suelo y poco a poco fue creciendo”, comentó Mirna. Sus clientes valoran el trato recibido y la variedad de productos, agradeciéndole por «salvarles la vida» cuando olvidan sus cosas. Con 20 años de experiencia en este puesto, se siente agradecida por la oportunidad de trabajar y apoyar a varias generaciones de estudiantes. “Me siento feliz y satisfecha de saber que puedo aportar un granito de arena a la educación de futuros profesionales”, dijo Mirna López.

Por otro lado, también existen comercios dentro de las unidades académicas. Este es el caso de una librería y fotocopiadora en la que trabaja Noelio Ortega desde los 15 años. Su hermana es la actual dueña de este espacio dentro de la Facultad de Derecho y comenzó como empleada también. Con el tiempo, fueron pidiendo libros y códigos, y hoy en día, todo lo que tienen en el espacio se vende. “Me siento satisfecho de darles apoyo; hay ocasiones donde no traen completo para pagar una ley y yo se las doy, al rato vienen y pagan porque el estudiante es muy leal”, comentó Noelio. Como empleado del lugar, se siente tranquilo al saber que parte del porcentaje de su mensualidad sirve para apoyar el futuro del país.

Para más información sobre la obtención de un espacio de venta en las instalaciones de la USAC, la Comisión de la Actividad Comercial cuenta con el correo electrónico: ac@usac-dsg.com y el número de teléfono: 2418-7832 a disposición de todas las personas que deseen ampliar más detalles.